Ahora sí que no tienes excusa para tener un antojo o darte un caprichito. ¡¡¡4 o 5 minutos!!! Éso es lo que necesitas para desayunar o merendar un delicioso bizcocho o hacer el postre ese día que alguien se presenta en tu casa ... ¡y se queda! Bueno, puede que al principio te lleve algún minutillo más porque hay que cogerle el truquillo a los tiempos del microondas y tener en cuenta algunos detalles.
Un mug cake es un bizcocho hecho en una jarra o taza de desayuno, de esas grandotas de 250 ml o 300 ml de capacidad. Mides los ingredientes con una cuchara, los bates con unas varillas o un tenedor, los pones en la taza sin ni siquiera engrasarla, los horneas en el microondas un minutillo y medio aproximadamente y te lo comes en cuanto se haya templado un poco. Eso sí, hay que tomarlos relativamente pronto, de lo contrario estarán chiclosos.
Ingredientes y elaboración
(para 3 tazas de 250 ml)
3 c/s de azúcar
2 c/s de mantequilla ablandada
6 c/s de leche
10 c/s de harina de repostería
2 huevos L
3 c/s de cacao en polvo
1/2 c/c de levadura en polvo
3 c/s de dulce de leche
1 pizca de sal
3 c/c de dulce de leche
Pon la mantequilla con el azúcar en un cuenco y bate enérgicamente con unas varillas. Echa la leche y mezcla bien.
Incorpora los ingredientes sólidos excepto las cucharadas de dulce de leche y bate hasta integrar el conjunto.
Vierte en las jarras hasta un pelín más de la mitad, deja caer una cucharada sopera de dulce de leche sobre la masa y llévalos al microondas de uno en uno poniéndolos sobre el borde del plato giratorio, no en el centro. Al principio hornea al máximo durante 45 segundos y después 1 minuto a 650 w.
Si ves que sólo sube por un lado gira la taza 180º a la mitad del tiempo, esto es que si el asa está situada a tu derecha colócala a la izquierda, así deberá subir por igual. Pincha una aguja hasta el fondo para ver si está hecho, no importa que salga con algunas miguitas pegadas porque conforme se va templando se cuaja más. A nosotros nos gustan muy, muy cremosos y para eso hay que dejarlos casi hechos, les quito unos segundillos de cocción y listo.
Antes de que sigas con los que te quedan te haré algunas observaciones que te van a venir bien, sobre todo si te has llevado un disgustillo con el resultado del primero. Lo bueno que tienen estos bizcochos es que puede que el primero no te salga mono pero te servirá de guía para los otros. Como en el microondas las masas suben volando si ves que se va a derramar lo paras, esperas unos segundos y sigues horneándolo a intervalos pero, eso sí, tendrás que llevar la cuenta de los segundos. Para los próximos reduces proporcionalmente las cantidades y así no tienes que estar tan pendiente.
Y para ver la consistencia igual, si te parece que está cuajado antes del tiempo indicado, paras, compruebas y decides. Es que esto del microondas es como todos los aparatos, ninguno funciona igual aunque programemos los mismos parámetros. Aviso, no te pases con la cocción.
A ver qué tal te va.
Ahora decóralos como quieras. Yo les he puesto azúcar glas y una cucharadita de dulce de leche cuando aún estaban calientes para que se pusiera cremosita.
Anímate con los mug cakes, invéntatelos. Cambia unos ingredientes por otros siempre que sean de la misma categoría, sólidos con sólidos, líquidos con líquidos, o equivalentes ... Te doy alguna idea. La mantequilla resulta más cremosa pero si quieres poner AOVE incrementa en 1/4 la cantidad. Cambia leche por zumos de frutas o por nata (reduciendo 1/3 la cantidad) con esencias del sabor que quieras. Pon frutos secos molidos a modo de harina en lugar de la de trigo, total o parcialmente. Añade frutos secos picados o frutas secas rehidratadas.
Juega con el tiempo de horneado, mejor dicho con el minitiempo, y prueba a hacer mini mug cakes en tazas de café o en las de expreso. Son unos segundillos y quedan minichulos.
Abreviaturasc/s Cucharada sopera
c/c Cucharada de café
ml Mililitro
L Grande
AOVE Aceite de oliva virgen extra
w Watio
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