martes, 8 de septiembre de 2015

Helado de leche caramelizada

























La leche caramelizada es una crema dulcísima que se hace con leche, azúcar, extracto de vainilla y bicarbonato sódico. O sea, dulce de leche. Si la llamamos así la primera idea que nos vendrá a la cabeza es que se trata de un preparado comercial, asequible, listo para usar,  lo tendrías hecho en un periquete y te quedaría estupendo, sin duda.  O que hemos cocido una lata de leche condensada hasta concentrarla, lo que también da un buen resultado. Pero a mí me gusta hacerla, te aseguro que la  leche caramelizada establece la diferencia entre las cremas comerciales y las caseras.

Puedes elaborar tu propio dulce de leche con tu toque personal, por la intensidad, porque el frío le resta potencia, para darle tu punto y no encuentres que se te quede agarrado en la garganta. Así que hazla a tu gusto.




Ingredientes y elaboración
(Para 1,5 l de helado)

Para la leche caramelizada
1,3 l de leche entera
400 g de azúcar
1/2 c/c de bicarbonato sódico
1 c/c de extracto de vainilla

Para el helado
500 ml de nata (35% de MG)
400 g de leche caramelizada

Para el caramelo líquido
200 g de azúcar
200 ml de agua



La leche caramelizada tardará un par de horas en estar lista, parece mucho pero piensa que si caramelizas una lata de leche condensada te llevará una, dos o tres horas, según el grado de concentración que quieras darle. 

Pon la leche en una cacerola a fuego medio hasta que empiece a hervir, añade el azúcar y revuelve con una cuchara de madera hasta disolverla. Incorpora el bicarbonato y el extracto de vainilla, baja el fuego al mínimo y no dejes de removerla. Mientras va evaporándose la leche irá adquiriendo ese tono marrón que la caracteriza. 



Cuando creas que tiene la textura y el color que a  tí te gustan apártala del fuego, saca una cucharadita a un plato y deja que se enfríe. Si mantiene la forma y no se desliza, está hecha pero recuerda que cuando se enfríe completamente espesará aún más. Puedes optar por devolverla al calor y aligerarla con algo de leche caliente, o dejarla evaporar un poco si quieres seguir concentrándola. Ya te digo, cuestión de gustos y de cómo crees que te dará un resultado más eficaz. 



Aún estando caliente envásalo en tarros esterilizados. Para esterilizarlos botes y las tapas se colocan en una olla sobre un paño, para que con los golpes del agua hirviendo no se rompan, se cubren de agua y se dejan hervir 20 minutos, se ponen a escurrir y listos para esperar el contenido. Una vez envasada la leche caramelizada se deja enfriar y se guarda en el frigo. 



Recuerda tener en el congelador el recipiente de la heladera 20 horas antes de utilizarlo. Monta la nata con el procesador de alimentos que tengas, Thermomix, batidora, Kenwood, ... Incorpora el dulce de leche y mezcla siempre envolviendo las dos cremas para que el montado de la nata no pierda volumen.



Pon en marcha la heladera y tras medio minuto girando vierte la crema obtenida. Pasados los 20 minutos pasa el helado al recipiente definitivo.  Si vas a hacer el helado manualmente la mezcla de nata y leche caramelizada se vierte en un cuenco y se pone a congelar.  Incorpora el dulce de leche y mezcla siempre envolviendo las dos cremas para que el montado de la nata no pierda volumen. Cada 40 o 50 minutos bátela enérgicamente o vuelve a pasarla por el procesador y devuélvela al congelador. Repite este procedimiento 3 o 4 veces hasta que la crema resulte cremosa y cuajada como para ponerla en el recipiente definitivo. Congela.

Para preparar el caramelo líquido calienta el agua en el microondas 2 minutos a 750 w. Pon un cazo hondo al fuego con  el azúcar y 4 cucharadas del agua caliente. Sin dejar de vigilarlo, deja que hierva a fuego muy bajo, irá cambiando de color y haciéndose el caramelo poco a poco. Cuando veas que empieza a tener un tono dorado ve incorporando cucharadas soperas de agua caliente, 10 o 12, removiendo todo el tiempo. Es muy recomendable que te pongas unos guantes de cocina porque caramelo alcanza unas temperaturas de vértigo y una salpicadura es una quemadura garantizada. 



Cuando esté bien incorporada  el agua al caramelo y vuelva a tener un bonito color dorado retira y deja enfriar. Al caramelo también le puedes poner sabor, así que, si te apetece o sólo vas a usarlo para acompañar este helado, admitirá perfectamente ponerle 2 o 3 gotas de extracto de vainilla. Cuando decidas que ya está al punto que te gusta rellena un biberón y ¡listo para usarlo!



He puesto una buena cantidad de caramelo sobre el helado envasado para que cuando haga las bolas lleven una pequeña dosis, amén del adorno final.

Y para la decoración, cualquier cosa. Caramelo, cuadradillos de avellana, de almendra, conguitos y cualquier tipo de eso que define ese  vocablo inglés que se ha colado en nuestro vocabulario: topping. 

Y qué tal sólo helado de leche caramelizada? 




Abreviaturas
c/s Cucharada sopera
c/c Cucharada de café
g Gramo
l Litro
MG Materia Grasa
ml Mililitro
w Watio





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