Esta vez ha tocado hacer lasaña de berenjenas, así la llamamos en casa por el parecido final pero, en cuanto a la factura, es más bien un pastel de vegetales y carne picada. Cuando aparecen en tu casa un par de cajas, cuando poco, de berenjenas así, como por arte de magia, no te queda otra que procesarlas, porque estas cantidades no se consumen así como así. Por tanto, ésta es otra odisea culinaria, como la del pisto, ya te dije que solía meterme en berenjenales.
La verdad es que no son necesarias unas cantidades determinadas, se trata de intercalar láminas de berenjena a la plancha, en lugar de placas de pasta cocida, alternándolas con diversas capas de carne y otras verduras. Me da igual cuáles y cómo, siempre y cuando sean berenjenas, perfecto. Tengo que gastarlas!!!
La verdad es que no son necesarias unas cantidades determinadas, se trata de intercalar láminas de berenjena a la plancha, en lugar de placas de pasta cocida, alternándolas con diversas capas de carne y otras verduras. Me da igual cuáles y cómo, siempre y cuando sean berenjenas, perfecto. Tengo que gastarlas!!!
Ingredientes y elaboración
(para 4 personas)
5 berenjenas grandes
200 g de champiñones
250 g de carne picada de cerdo
150 g de carne picada de ternera
1 k de tomates maduros
2 cebollas grandes
4 dientes de ajo
1 zanahoria
3 pimientos verdes
1 pimiento rojo
100 ml de vino blanco
300 ml de bechamel
2 paquetes de queso rallado
Sal
Pimienta
Orégano
AOVE
Para hacer el relleno de tomate y verduras, lávalas y sécalas. Cubre el fondo de una cazuela con aceite y ponla a fuego medio. Añade, en primer lugar, los ajos laminados, cebolla y media cortada groseramente y la zanahoria en medias rodajas finas. Cuando empieza a volverse transparente la cebolla, baja el fuego, incorpora los pimientos troceados irregularmente, una berenjena cortada a cuadrados de tamaño medio y deja que se vaya pochando todo esto. Mientras, escalda, pela y trocea los tomates con un corte muy pequeño. Pasa el tomate por un colador de malla fina para quitarle parte del jugo -que podemos convertir en zumo de tomate y tomar con sal y pimienta-. Incorpóralo a la cazuela, pon sal, pimienta y orégano y deja que cueza hasta que veas que el jugo de la cocción ya no es turbio, lo que quiere decir que está listo. Puede que tarde 40 ó 50 minutos, pero yo prefiero hacerlo a fuego bajito. Si quieres, tritura este relleno, lo mezclas con la carne y obtendrás algo parecido a una boloñesa, pero si no la trituras cuélala para eliminar el exceso de aceite que pueda tener.
Mientras, prepara las berenjenas. Lávalas, sécalas, córtales el pedúnculo y rebánalas a lo largo con un grosor de 4 ó 5 mm. Puedes asarlas en el fuego, a la plancha, en el horno o en microondas con grill, la cuestión es que te queden tiernas, con algo de color pero no asadas completamente. Les pones sal, pimienta, orégano y un chorrito de aceite por encima. Lo más cómodo y rápido es hacerlas en el horno porque puedes poner mayor cantidad en cada tanda, a 180º, con calor arriba y abajo, durante 15 minutos más o menos, depende del horno. A la mitad del tiempo dales la vuelta para que se cocinen por igual.
Ahora le toca el turno a los champiñones. Rehógalos en una sartén con un chorrito de aceite y sazonados lo justo, ya ves que cada una de las partes lleva la condimentación correspondiente. Les pones su poquita de sal, pimienta y orégano y los cocinas hasta que los veas doraditos.
Ahora la carne. Pon a fuego medio la sartén más ámplia que tengas le pones aceite para cubrir el fondo, pica más bien fino la media cebolla que nos queda, añade una pizca de sal y cocínala hasta que esté transparente. Incorpora los dos tipos de carne picada, otra poquita de sal, pimienta y orégano. Al principio se apelotonará, por lo que hay que removerla bastante para que se vaya soltando. Yo lo que hago es hacer sitio en el fondo de la sartén y aplastar los montoncillos de carne con un tenedor, por eso viene bien poner una grande. Así, a mí, me gusta cómo queda. Nada más empezar a dorarse, estará tierna y jugosa.
Y, por fin, la bechamel. Todo depende de los gustos pero lo de la bechamel es más delicadillo. Yo, para esta ocasión, hago la bechamel básica del post de las croquetas con la diferencia de poner solamente leche.
Pues ¡hala! a montar el pastel! Desde luego, merece la pena escoger una buena fuente, que sea refractaria, claro. Saca a pasear tu creatividad y ve montando capas de los diferentes ingredientes. Yo los pongo así: la primera capa serán berenjenas, encima pongo un rociado de queso rallado y una poca de bechamel, después el relleno de tomate y verduras, champiñones y la carne. Y, de nuevo, vuelta a empezar con otra ronda de estos deliciosos estratos. Acabamos con una tanda de berenjenas. Ponemos bien, pero bien, de salsa bechamel y cubrimos igual de bien de queso rallado. Mon Dieu!!! parecía que no llegara el momento de meterlo en el horno y gratinarlo. Y comérselo, no me dirás que no llevas un siglo salivando.
Ahora os cuento. Como en cualquier otra odisea culinaria que se precie, pasamos a la fase de envasado. Ya veis, los preparo de manera que van directos del congelador al horno y del horno a la mesa, en un santiamén.
Preparo también bechamel de leche sin lactosa po que algunas personas de mi familia son intolerantes, pero no es ningún problema hacerla en dos veces. Y, por supuesto, bien etiquetado todo.
Preparo también bechamel de leche sin lactosa po que algunas personas de mi familia son intolerantes, pero no es ningún problema hacerla en dos veces. Y, por supuesto, bien etiquetado todo.
Buen provecho y a descansar.
Abreviaturas
k Kilo
g Gramo
ml Mililitro
mm Milimetro
AOVE Aceite de oliva virgen extra
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